El barril sin fondo Metro se traga todo el Presupuesto y más pero al fin y al cabo sólo Diandino Peña y Leonel Antonio Fernández Reyna se quedarán con la tajada del león cebado

Los palidistas pelegatos, expertos en que los cuantiosos derroches se queden sin traspasar los límites de su parcela politiquera, cada vez afectada de mayor descrédito y desprestigio, no logran explicar cómo, en el primer mes del año, incurrieron en la inversión de 400 millones de pesos en el Metro de Diandino Peña, con su cara de viejo perro San Bernardo, y el simulado extraterrestre, Leonel Antonio Fernández Reyna, al que poco o nada le importan la suerte ni la situación que afecta a la ciudadanía.

Es que, mientras así divulgan la gran inversión hecha para el Metro los organismos oficiales, poco o nada dicen en cuanto a la inversión hecha en salud, hospitales, educación, electricidad, agua potable y sistema sanitario como en medio ambiente. Mientras tanto, los diversos centros de investigación económica advierten, que es posible que la inversión gubernamental en las áreas de servicio, alcance la cifra cero.

Ya hacía 2 ó 3 meses, que Salud Pública no entregaba un centavo de los pírricos subsidios que esta dependencia estatal debe entregar cada mes a los hospitales públicos.

Además debe saberse que Leonel Antonio Fernández Rey-na y Diandino Peña esperan repartirse entre ambos el 30% o más, a título de beneficio, del costo del Metro, que si se calcula en 36 mil millones de dólares, ascendería a 12 mil millones de dólares, si el costo fuera 30 mil millones, la ganancia de éstos dos pejes sería de 9 mil millones de dólares y así sucesivamente.