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Fines particulares del terrorismo de Estado del gobierno narco-terrorista
Leonel Antonio Reyna instauró terrorismo estatal y restauró el asesinato como tarea del Estado, sujetándolo a un minucioso pormenorizado programa de asesinatos, con lo que, de hecho, Leonel Antonio Reyna creó el sistema criminal imperante, con los escuadrones policiales de la muerte como sus autores. Este sistema sincronizado de ejecuciones extrajudiciales tiene entre sus objetivos dar protección a las actividades delictivas oficiales que Leonel Antonio Reyna encabeza y que tienen como centro el Poder Ejecutivo del gobierno central. Se consagra como el más despiadado asesino de indolencia sanguinaria nunca antes conocida en el país. Todo para tratar de encubrir robos y saqueos al país, como fuente de enriquecimiento personal, de los que hay pruebas en abundancia desde el inicio de su primera gestión en 1996.
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