No sólo con lo de las fraudulentas y espurias elecciones congresionales recién efectuadas, y a las que el pueblo con derecho al voto repudió al abstenerse en más del 60% de concurrir a votar, sino en la impunidad que se regalan, comparten y tratan los unos a los otros y todos entre sí, pero realizada en la conversión de esos tres partidos en socios asociados alrededor de la corrupción y su obediencia común ante los monopolios, poderes e intereses expoliadores con los que efectúan sus acciones antinacionales y antipopulares.

Rafael Hipólito Mejía, haciendo gala de la truculencia cerril, confesó que la concertación que lleva a cabo con el Pálido y con el PRSC fue una iniciativa del socio financiero No. 1 de Carlos Andrés Pérez, Ramón Báez Figueroa, de que había urgente necesidad de un pacto conciliatorio entre esos tres partidos con su gobierno a la cabeza.

Los periódicos escritos, radiales y de televisión, pertenecientes a esos intereses espurios, razón principal de su amarillismo, han difundido esa información desde el 20 de mayo con insistencia.

Pero cabe resaltar que con los de FENOSA y sus dependencias de las distribuidoras de electricidad, en su expoliación y estafa salvaje del pueblo dominicano y del país, es que más se corroboran las alianzas y pactos, junto a sus naturalezas, que existen entre Rafael Hipólito Mejía y el PLD-Leonel Fernández. Se comprueba que ambos reciben monumentales beneficios de FENOSA y sus dependencias. ¿Cuánto le dan a cada uno por kilovatio facturado? De Leonel se afirma -y lo creemos- que recibe de las flotantes que están entre San Pedro de Macorís y Boca Chica, un centavo de dólar por cada kilovatio facturado.

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