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Guido Gómez Mazara, Aristy Caraballo junto a Virgilio Almánzar en la picota del mundo delictivo con indultos para comisión delitos mayores
Guido Gómez Mazara y el Fiscal del Distrito Nacional Máximo Aristy Caraballo son de los que, junto con Virgilio Almánzar, aparecen como los que tramaron lo del indulto al recluso que, una vez en libertad el 23 de diciembre, ya el mismo día estaba de lleno en las actividades para secuestrar y dar muerte a dos sujetos de Nagua que habían incumplido compromiso con los ajustadores de cuentas del narcotráfico internacional. Pero lo más simpático de todo es que este recluso libertado, fue el primero en ser ejecutado a su vez por el escuadrón de la muerte de la Policía Nacional, evidentemente para que no tuviese oportunidad de hablar. En boca cerrada no entran moscas. El otro asesino fue aquel guardia que trabajaba en la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), implicado y acusado del secuestro de un sujeto de Barahona apellidado Feliz Matos, al que dieron muerte después de torturarlo, y que por obra y gracia de la Judicatura de Subero Isa, obtuvo su libertad en un sospechoso Habeas Corpus. Cada vez que se mueve algo que tiene que ver con el narcotráfico y sus monstruosidades, hay un conjunto de funcionarios del gobierno de Rafael Hipólito Mejía que de inmediato aparecen bailando en el medio. Guido Gómez Mazara y su equipo, del que forma parte Máximo Aristy Caraballo, son de esa distinguida selección. Y su protector no es otro que el honorable Presidente de la República, Rafael Hipólito Mejía: "Yo continuó en el Poder pero preso, no voy".
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