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De cómo el hampón ex-Presidente Rafael Hipólito Mejía arrodilló al perrodé y asinceró el reeleccionismo de Fello Babita Suberví y de la etílica Milagros Ortiz Bosch
Se cuentan las historias de cómo el hampón Rafael Hipólito Mejía, mientras fuera Presidente, manejaba los asuntos para imponer su candidatura a la reelección presidencial, a la que se oponían los llamados precandidatos antireeleccionistas, donde estaban los Esquea Guerrero, Fello Suberví, Milagros Ortiz Bosch, Hatuey Decamps, Abinader, Ramón Alburquerque, Rafael Flores Estrella y otros que cayeron en el intento. Una de esas historietas revela la forma en que Rafael Hipólito Mejía se deshizo en particular de Milagros Ortiz Bosch y de Fello Suberví, cuando éstos aún estaban en un comité de la convención de los antireeleccionistas y, al parecer, bajo esa misma forma lo habría logrado con los demás, salvo con Hatuey Decamps y Flores Estrella. En dicha historia de cómo Rafael Hipólito Mejía puso en su justo lugar a Fello Suberví y a Milagros Ortiz Bosch, se da cuenta de que el hampón convocó a una reunión a estos dos personajes a un lugar determinado y, una vez allí reunidos los tres, en la que Fello Suberví y Milagros Ortiz Bosch no sabían qué les iría a plantear el capo Rafael Hipólito Mejía, éste, sin dar rodeos, soltó unos papeles en la mesa de reunión. En un fólder, que tenía el nombre: Fello Suberví, se detallaba cuántos millones éste había robado aquí, allí y acullá, en esta esfera correspondiente al Ayuntamiento (en lo que estaría involucrada hasta más arriba del cuello su esposa, Miguelina de Suberví, conocida en ciertos círculos por varios motes, cada uno de singular significado, como “La Chiquita” en ciertos círculos, en otros como “La Sindiquita”), en estos otros manejos, en fin, cuentas claras y precisas. Al concluir con Fello Suberví, éste estaba con unos sudores y unos temblores que se llegó a creer la ocurrencia de un infarto, y como conclusión, sólo se oyó el atropellante tono del hampón que le decía: "De manera que te dejas de pendejá y pasa a respaldar mi reelección o hasta aquí llego la historia sucia y rastrera del Indio Suberví de la Perla del Sur, Barahona". Saca el hampón el fólder Suberví de la mesa y entra el expediente Milagros Ortiz Bosch. Y el anfitrión de la reunión empieza como en el caso anterior y dice: “Mira tú, Milagros, lo tuyo está aquí más claro que el agua”, y le detalla una a una las jugarretas de Milagros Ortiz Bosch que, como buena sacerdotisa vieja del culto a Baco, dicen que la Milagros Ortiz Bosch sólo atinó a decir: “Démen un trago sin hielo de Barceló, que es el que me gusta” y ráquete, se lo jondió de un tirón. Milagros Ortiz Bosch dijo: "Bien, me retiro, pero no voy a hacer campaña". ¿Saben ustedes radioyentes de “La Voz del PACOREDO” y lectores del periódico “¡Despertar!” qué papeles y qué detalles le presentó el hampón Rafael Hipólito Mejía a Milagros Ortiz Bosch, la vieja ratatatá, que es de la misma escuela o corriente que Doña Miguelina de Suberví (alias La Chiquita)? ¡Oh!, muy sencilla es la respuesta. Fueron los mismos papeles de la auditora que la Cámara de Cuentas le había hecho en la Secretaría de Educación, a cuyo frente estaba Milagros Ortiz Bosch. La estafa con los detalles que ahora, el día lunes 10 de enero del 2005, salió a la opinión pública, efectuada por Milagros Ortiz Bosch en la Secretaría de Educación es, conservadoramente, en lo comprobado sólo en nómina, de 5 millones cada mes. 60 cada año por 4 suman 240 millones. Milagros Ortiz Bosch es la que organiza la nueva convención del perrodé para adecentarlo. ¿Qué cree usted, ciudadano, cogido tantas veces de pendejo por estos aventureros manos ligeras?
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