DEMUESTRAN LOS TRAIDORES PERIODISTAS, EN REALIDAD VILES MERCENARIOS, QUE NO ACEPTAN LA LIBERTAD DE PRENSA, SINO COMO SU PRIVILEGIO, Y QUE BUSCAN QUE SE NOS PERSIGA Y COARTE POR NUESTRAS IDEAS

Abogamos por el castigo ejemplar y drástico a los traidores a la patria como Juan Bolívar Díaz Santana, Huchy Lora, Roberto Cavada, Marino Zapete, Manuel Quiroz, Alicia Ortega, Miguel Guerrero y demás sabandijas

05-02-2015

 

Lo que buscan los mercenarios, traidores a la nación, al pueblo y a la República Dominicana, es que se nos coarte y se nos impida el derecho de libertad de pensamiento, y de la libre expresión y difusión de las ideas, a los que defendemos la soberanía y la autodeterminación del pueblo y la nación dominicanos; a la vez que abogamos por el castigo ejemplar y drástico a los traidores como Juan Bolívar Díaz Santana, Huchy Lora, Roberto Cavada, Marino Zapete, Manuel Quiroz, Alicia Ortega, Miguel Guerrero y demás sabandijas.

Tenemos la idea de que merecen la muerte. Esta es nuestra idea respecto a éstos y demás traidores. Así lo pensamos, así lo expresamos, o sea, esta es nuestra concepción ideológica.

Los traidores deben presentar sus ideas al respecto, y demostrar por qué no deben ser castigados, sino premiados y celebrados. No cabe duda que lo que están demostrando los traidores periodistas, en realidad viles mercenarios, es que no aceptan la libertad de prensa, sino como su privilegio; y que buscan que se nos persiga y coarte por nuestras ideas, para impedir que pensemos de esa manera, y que digamos que la comunidad los objetivice como traidores, que es lo que en realidad son.

No obstante, los traidores recurren a hacer bulla y causar alharaca de que hemos urdido y trazado planes específicos para, efectivamente, darles muerte fìsica. Y, para tal efecto , presentan como prueba que en sitios de concurrencia pública, como los supermercados, gente les ha voceado: “A ustedes hay que matarlos”; esto es, a los traidores.

Como se puede ver, se trata de una percepción que no tiene ningún significado práctico ni efectivo, sino la idea de un deseo.

Si alguien pasa por un banco y expresa la idea de que desearía tener una gran cantidad de dinero, que sabe hay en ese banco, y piensa que hasta robaría el banco, si acaso tuviera la oportunidad, para obtener ese dinero; no quiere decir que haya cometido el delito de robo al banco ni haya programado ni planeado hacerlo.

¿Cómo se le podría impedir a una persona que tenga la convicción ideal de que a los traidores haya que matarlos?

Y, ¿cómo decir, sostener y demostrar que, por esa persona tener la percepción, en su concepción de ideas, de que los periodistas mercenarios, como Huchy Lora y Juan Bolívar Díaz Santana son, efectivamente, traidores al país y que merecen la muerte, son pasibles de ser acusados de estar fraguando el asesinato de esos miserables mercenarios traidores, periodistas anti-dominicanos, pro-imperialistas y pro-haitianos?

 

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