Cumpliendo órdenes del patán parásito vividor del Estado Josesito Hazim, los mercenarios Fernando Pérez Memén, Luis Scheker Ortiz, César Mella y Leonidas Martínez, en su libelo, propugnan por perpetuar gobiernos neoliberales y confesionales al servicio de los monopolios imperio-capitalistas y la parásita Iglesia Católica

 

Precisamente por haber llegado a la conclusión de que el comunicado de la Fundación San Pedro de Macorís Incorporada es una propuesta acabada de plataforma para proseguir con gobiernos tipo el actual, ultra-neoliberal, de absoluto dominio sobre la República Dominicana de los consorcios monopolistas imperio-capitalistas coaligados con el nefasto parasitismo vividor de la Iglesia Católica-Vaticano perpetuando el Concordato, el Vicariato Castrense y el Patronato Nacional San Rafael, y por lo tanto, continuar con gobiernos neoliberales que ahonden y profundicen hasta extremos totalmente insoportables para las gentes criollas la miseria y la pobreza que padecen los dominicanos, como resultado de la bestial explotación y opresión que pesan sobre el pueblo dominicano, es que entendemos que el tal comunicado es, por su contenido, un libelo de carácter en extremo dañino y nocivo para el país y el pueblo, y que en el caso particular de la Provincia de San Pedro de Macorís, su población, esto es, la población petromacorisana, no puede respaldar ni mucho menos votar por Josesito Hazim para Senador de la República, ya que en caso de que el pueblo de esa Provincia favorezca con su voto a este funesto personaje, que encarna la peste árabe que azota al país y el pueblo dominicanos, estaría sólo afilando cuchillo para su propia garganta y para que el parasitismo a costa de la nación quisqueyana prosiga en todas sus formas y vertientes con caracteres galopantes.

El nefasto contenido antinacional, anti-dominicano y anti-popular del libelo reaccionario de la Fundación San Pedro de Macorís Incorporada se puede palpar sin necesidad de mayores esfuerzos en los temas tratados de la democracia, en el que su menú es categórico y claro: o el pueblo dominicano acata y sumisamente toma el actual despotismo parasitario como democracia, o prepárense para la dictadura que ofrece y por la que aboga el Cardenal Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez, tipo Trujillo. En el de la educación, donde reafirman que se le niegue la educación escolar al pueblo trabajador del campo y la ciudad, manteniéndose, en cambio, dicha actividad en manos privadas, como las del negociante y patán parásito vividor del Estado Josesito Hazim y de la Iglesia Católica, conforme el infame Concordato, que se prolonga aún cuando es inconstitucional e ilegítimo, por cuanto es contrario al Art. 8 de la Constitución que proclama la libertad ideológica y de creencia; es inconstitucional además, puesto que ese infame y parasitario como oscurantista y vil Concordato enajena e hipoteca la soberanía estatal, que es establecida y reconocida en el Art. 3 de la misma Constitución vigente; y es ilegítimo en varias y diversas opciones, como son que el Concordato dispone que el Estado dominicano pierda su soberanía nacional y su independencia y se prostituya y pervierta como un Estado confesional católico-cristiano, lo que impide que se reconozca y tenga vigencia el pluralismo ideológico y de creencias y convicciones, que es consustancial e inseparable de un Estado democrático y de Derecho, que es lo que se proclama como la naturaleza del Estado dominicano en dicha Constitución.

Resulta que el libelo (subrayamos que éste y no otro es el verdadero carácter del comunicado del parapete del representante del parasitismo de la peste árabe que azota al país, Josesito Hazim, por cuanto es una receta contrapuesta a los sanos y vitales intereses del pueblo trabajador, en tanto sólo favorece tanto a la élite burguesa explotadora y a los consorcios monopolistas extranjeros como a la parásita Iglesia Católica-Vaticano, que es lo que le da el carácter indecente e indigno que lo convierte en libelo), en su acápite IV, en el que hace un subtítulo aparte del Estado (como si todos los 11 temas abordados no fuesen 11 aspectos todos y cada uno concernientes exactamente al Estado), se explaya en forma harto desvergonzada, descarada e insolente y proclaman, en su libelo, los 4 rufianes que echaron a Pedro en el pozo, estos son, Fernando Pérez Memén, Luis Scheker Ortiz, César Mella y Leonidas Martínez, que en cuanto al Estado dominicano, lo que hay que aplicarle como solución final y definitiva es su total y absoluta descentralización, o sea, consumar de una vez por todas el descuartizamiento e inutilización del Estado dominicano, lo que equivale a que, así como hace, por medio de la privatización de los hospitales públicos, de la educación, de la salud, de los bienes, empresas y riquezas del Estado, se prosiga privatizando el agua potable y de reguío, se privaticen los ayuntamientos, se enajene, regalándoselo a parásitos tipo el patán Josesito Hazim, lo que resta de patrimonio nacional dominicano.

Pero no sólo esto, que de por sí es demasiado depravado (sí depravado es el término que corresponde para juzgar estas patrañas viles de semejantes lacayos, hombres de paja y hombres babosas), sino que con esa demanda de consumar, hasta el extremo de la disolución de la nación dominicana, la llamada descentralización del Estado del libelo de la Fundación de la peste árabe, se está propiciando que se anulen las FF.AA. y la P.N., sobre todo en los aspectos correspondientes y concernientes a sus funciones como órganos coercitivos base del Estado nacional dominicano, que han de operar en defensa de la integridad territorial y de la soberanía nacional, particularmente en lo que respecta y atañe en forma directa a la invasión masiva de haitianos a lo que, contrariamente a lo sustentado y enarbolado por los crápulas mercenarios Fernando Pérez Memén, Luis Scheker Ortiz, César Mella y Leonidas Martínez, el Estado dominicano debe ponerle freno cuanto antes, en aras de preservar a la República Dominicana como nación no haitiana ni vandálica.

Continuaremos, que es mucho lo que nos falta aún.

 

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