Los embaucadores Chuky Suero y Senán Caba conducen al Colegio Médico a arrastrarse ante el verdugo de los médicos y del pueblo que es el criminal parásito Nicolás de Jesús Hildebrando-Borgia López Rodríguez

07-07-2009

De tanto fomentar vagabunderías de supersticiones y hechicerías como encuentros de rezaderas y misas, propias de salvajes, de engañadores, de timadores, terminaron, los mismos que des-dirigen el Colegio Médico Dominicano, encabezados por el dúo de embaucadores Chuky Suero y Senén Caba (pareja de estafadores encanallecidos al grado extremo), alienados y enajenados y así, decidieron recurrir, como mansas ovejas, a donde su sanguinario pastor para ponerse en sus manos a fin de que éste, como verdugo vividor y ambicioso, negociante con todo lo que sea servicios sociales, termine de esquilmarlos o descuartizarlos para venderlos, en caso de que no desee engullírselos él mismo.

Sólo así podemos describir el hecho de que una comisión del Colegio Médico Dominicano, encabezada por su Presidente, Waldo Ariel Suero, como perritos falderos, comparezcan ante el perverso vividor y parásito sanguinario, alias el cardenal Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez a pedirle, a suplicarle, que interceda por ellos a fin de que el gobierno y el nariz de tetera Secretario de Salud Pública, accedan a producir el aumento salarial tan reclamado por los médicos.

Mientras sujetos tan despreciables, pusilánimes y cobardes, como Waldo Ariel Suero, sean los que dirijan el Colegio Médico Dominicano (CMD), la lucha de los médicos por salarios justos está condenada al fracaso, pues resulta que es precisamente la amoral y nociva práctica del gobierno, de entregarle los fondos de salud del Estado a la supersticiosa, oscurantista y hechicera trasnacional religiosa Iglesia Católica-Vaticano y específicamente a ese mismo métesentodo y quiérolotodo y socio en sociedad del golpista cardenal de Honduras, Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, el repugnante Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez el primer impedimento para que los médicos obtengan sus reivindicaciones, pues eso sólo se logrará cuando la parasitaria y vividora Iglesia Católica-Vaticano, y sus prelados, dejen de robarse los recursos que el Estado ha de utilizar para cubrir los gastos del sector salud, entre los que ocupan un papel estelar el pago de sueldos dignos a los médicos del Estado.

Definitivamente, para que el Estado asuma, junto a los médicos y el personal de salud, la responsabilidad de la salud, atención médica y hospitalaria de la población, se requiere que deje de financiar a la parasitaria Iglesia Católica-Vaticano, que es la dueña de centros de salud como la Plaza de la Salud, la cual subvenciona el Estado pero opera como una clínica privada del parásito ensotanado alias Cardenal Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez, sin obligación de ningún tipo para con la ciudadanía que requiere y demanda servicios médicos y hospitalarios.

Los miembros del Colegio Médico Dominicano deben de exigir la derogación inmediata del Concordato y sus aditamentos, el Vicariato Castrense y el Patronato Nacional San Rafael, como primer paso para que los problemas nacionales, entre ellos los del sector salud, encuentren una solución favorable a la población trabajadora y a los sectores productivos del país.

Así como deben exigirle a su Presidente una postura digna en la búsqueda de la solución de sus justos reclamos.