La in-formación del disoluto Leonel Antonio Reyna es producto de los manuales transversalizados de la CIA

De ahí que, junto a la canalla pálido pelegato, esté impulsando los objetivos del imperio capitalismo y la parásita Iglesia Católica de fusionar la República Dominicana con Haití y los haitianos

Se propone eliminar el idioma español como transmisor de contenidos, esencial para la dominicanidad

27-12-2010

La educación que imparte la CIA, al igual que todos los cuerpos de espionaje, particularmente del imperialismo norteamericano, posee el carácter de una educación transversalizada, cuyo eje transversal, alrededor del que se desenvuelve, es el lavado de cerebro, en lo de la anulación de toda posibilidad, tanto de percepción transparente de una realidad diferente, como de soluciones efectivamente pertinentes, que no sean las que resultan complacientes y satisfactorias en un ciento por ciento, para los centros de mando políticos e ideológicos norteamericanos, como de sus arterias vitales financieras, compuestas por el capital monopolista internacional, cuyo núcleo es el capital financiero norteamericano.

Si analizamos la jerga de Leonel Antonio Reyna, y que en este caso, como casi en todos, resulta ininteligible y equivalente a galimatías y oscuro embarre de richeces, a los que nadie puede aproximarse mucho, puesto que a corta distancia resultan ser una tóxica e inexorable carga venenosa letal, que por lo menos provoca, con sólo entrar en contacto olfativo con ellas, una intoxicación peor que la que causa un pez como la picúa y otros cuando están asiguatados, cuya diarrea y vomitadera que causan es lo mas parecido que hay a una infección por cólera; como esa de que: de la educación nacional, hay que cambiar el estilo pedagógico y el contenido curricular; cuyo objetivo es la estafa sin parangón o punto de comparación, que entraña su participación en la conspiración en contra de la nación Dominicana y favorable a la fusión con Haití, con su llamada reforma educativa transversalizada, que elimina, asesinando, la enseñanza de la gramática española o castellana, que es la que contiene la reglamentación correspondiente al uso y empleo del idioma como medio de comunicar significado.

Tómense los dos casos más vivos en la actualidad como: el desfalco, saqueo, estafa, del Seguro Medico de los Maestros (SEMMA); y el de la sorpresiva reforma educativa transversalizada, que furtivamente han decretado llevar a cabo, en los que están involucrados los depravados, en ambos expedientes, las mismas personas, como son: Melania Paredes, Rhadamés Camacho, y María Teresa Cabrera, no obstante que en el caso especifico de SEMMA, con una quiebra o robo de cerca de 1,000 millones de pesos, están inmersos otros personajes como la anterior incumbente del Ministerio de Educación, Alejandrina Germán y el clan de los marianos Germán, así como Alma Fernández, la vice-síndico de Roberto Salcedo, y su hermano Jaime Fernández, todos altos dirigentes pálidos pelegatos e incondicionales de Leonel Antonio Reyna. Lo que nos lleva a la persona de Leonel Antonio Reyna, como el sospechoso número uno de toda la trama.

Tomemos el escandaloso y catastrófico caso de la entronización, por medios arbitrarios y putchistas, al estilo bonapartista, bismarquista o simplemente y llanamente golpista, en franco desprecio de la profesionalidad, con criterios propios y auténticos, sobre la crisis educativa nacional, de la llamada reforma de la educación transversalizada, que busca, supuestamente, hacer que la enseñanza y los conocimientos que se impartan en la escuela al estudiante o aprendiz, sujeto del aprendizaje, tengan aplicación práctica inmediata o casi inmediata.

Como se puede apreciar, sin necesidad de ser experto pedagógico ni didáctico, la cuestión más importante de toda la enseñanza y la educación que se imparta bajo la susodicha concepción, de la educación transversalizada, es el llamado eje transversal, sobre el que se despliega y desarrolla la enseñanza de las diversas materias, disciplinas o ciencias, buscando que sea el motivo y estimulo del aprendizaje; por lo que resulta una monstruosidad que el significado o contenido, que hace de eje transversal del texto integrado, sea el punto de vista contrario a la existencia de la Nación Dominicana; por lo que ese programa se asienta en la negación y el aplastamiento del orgullo de la dominicanidad como nacionalidad, y, por lo tanto, la Nación Dominicana, que es la patria que nos alberga, nos aúna, y con la que los dominicanos estamos obligados a luchar para preservarla, desarrollarla y consolidarla, impidiendo que colapse y se convierta en un estado fallido; por lo que es necesario enfrentar a los auspiciadores, como lo son Leonel Antonio Reyna y la Iglesia Católica-Vaticano, de la destrucción y desaparición de la Nación Dominicana.

La conspiración o conjura que se mueve con y alrededor del texto único de esa aviesa como siniestra educación transversalizada, posee varios rasgos fundamentales, que todos los dominicanos, todos los padres de familia y partes activas de éstas, no pueden dejarse engatusar, ni que los cojan de pendejos.

El primer rasgo nocivo que aparece en forma desvergonzadamente clara, es la eliminación del idioma español, que es la diferencia que marca el punto de partida esencial de la República Dominicana y Haití, entre los dominicanos y los haitianos.

Así, en el texto integrado transversalizado del primer nivel, como se ha denunciado desde muchos ángulos y puntos de vista, se elimina la enseñanza de la gramática española. Este asunto es mucho más grave aún, puesto que representa un atentado directo a la Constitución de la República, que establece y reconoce, como oficial, el idioma español de la República Dominicana.

Esa monstruosa acción, la lleva a cabo el grupo del gobernante pálido pelegato que, nuevamente, en contra de la Constitución, en estrecha alianza y sumisión abyecta, que adquiere todos los relieves del más espurios y podrido matrimonio, entre crápulas, con la Iglesia Católica-Vaticano y con el capital financiero imperio capitalista, particularmente el norteamericano.

Pero en segundo lugar, conforme, al ya de público conocimiento, retorcido interés de fusionar la República Dominicana con Haití, que cocinan los Estados Unidos, la Unión Europea, España, Francia y la Iglesia Católica-Vaticano, hay interés marcado de borrar, en el estudiante infante, todo sentimiento patriótico; lo que tiene graves repercusiones futuras, puesto que se trata del nivel básico, del primer curso al cuarto curso. Y sin embargo, no se estimula ni se trata de crearle conciencia patriótica, de amor y respeto a la República Dominicana, sino que esta función, que debería ser obligatoria en la enseñanza nacional dominicana, como hacen todos los países del mundo, aquí, y en ese texto integrado, es sustituido por el amor del niño hacia su provincia, y no por la República Dominicana en conjunto; lo que está mas claro que el agua, que posee, dicha reforma, un inequívoco significado y contenido de objetivos corrosivos, disolventes de la nación. Y ahí es más que patente y evidente, la presencia estelar de la concepción de la Iglesia Católica-Vaticano y su idealización aberrada del régimen medieval, donde la Iglesia Católica-Vaticano era ley, batuta y constitución.

En tercer lugar, en ese texto se le deforma y se le lava, desde la primera infancia, el cerebro a los niños, respecto al deliberado ocultamiento, de que la base, fuente, piedra angular y punto de partida de todas las diferencias, luchas de clases y políticas como ideológicas y religiosas, al igual que toda y cualquier discriminación racial, ideológica, que son absolutamente predominantes, esa base no es otra que la explotación del trabajador por el capitalista y los terratenientes, junto a la Iglesia Católica-Vaticano y el imperialismo norteamericano y sus monopolios; que es la relación material económico social, pilar de sustentación de la actual injusta sociedad.

En ese texto se llama a luchar contra la discriminación, pero lo primero que se hace en dicho texto es falsificar, burda y groseramente, el significado más importante del concepto discriminación, la práctica de discriminar, las que exponen y elucidan haciéndolas aparecer como salidas de un misterio oculto y supersticioso y no de la naturaleza del régimen capitalista, o cual que sea, que se base en la explotación de las inmensas mayorías de la población, por parte de una minoría dominicana y extranjera insignificante.

Por ejemplo, en la página 161 del texto integrado para el cuarto grado, en su unidad 2, se pone en recuadro, que discriminar significa: tratar como inferior a una persona o grupo por motivos étnicos, religiosos, políticos, económicos, de nacionalidad o sexo. Esta acepción de la palabra discriminar, es de por si unilateral, y, en este caso, se usa en forma perversamente mal intencionada, que entre otras cosas muestra, que la educación que se ofrece con el carácter de transversalizada, no es siquiera de un cuarto submundo, que esté por debajo, del ya denigrante tercer submundo, que es harto conocido, puesto que se le niega y se le oculta al niño, al infante que está aprendiendo en su nivel inicial, que la palabra y concepto discriminar es un principio esencial para la aparición y desarrollo de la civilización, de la evolución, de la cultura y las ciencias todas; menos que de la brujería, que es la religión, en especial la criminal parasitaria Católica y cristiana con sus sectas de imbéciles.

Mintiendo y estafando, en el texto se dice, que el diccionario define discriminar como una práctica principalmente racial o religiosa. Y esto es sólo una segunda acepción del concepto discriminar, cuya primera acepción, en cualquier diccionario de la lengua española, como de cualquier ciencia natural o matemática, discriminar es diferenciar, separar. Por ejemplo: a quien le gusta el mango banilejo sobre el guerrero, o el lechosa injerto, está seleccionando, está discriminando, en base a diferenciar para su paladar, los tipos de mango. Del mismo modo que en los laboratorios, para determinadas pruebas de análisis, se usan unos productos y no otros, lo que es, efectivamente, una discriminación.