No nos callaremos en denunciar la indolencia criminal del gobierno del disoluto y perdulario Leonel Antonio Reyna y su depravado Ministro de insalubridad e insanidad públicas en su desatención a la población frente a la epidemia del cólera

El papel de la directiva del CMD y su presidente Zenén Caba no podía ser más abyecto y mercenario al venderse por 30 millones de pesos

06-01-2010

De una familia de dominicanos, castigada en su máxima crudeza por las condiciones de indigencia extrema, dos de seis niños ya murieron de cólera en el hospital de La Maguana, y de los cuatro restantes, otros dos se encuentran bajo los efectos de la inclemente epidemia del cólera; existiendo más de un 70 por ciento de posibilidades de que mueran en cualquier momento, dado el severo cuadro de desnutrición que por igual les afecta.

Esta familia, para los que quieran comprobarlo, y a lo cual le extendemos una solícita invitación, especialísima, al perdulario indolente, desaprensivo, y amoral fulano, Leonel Antonio Reina, a su mujer, tal para cual, Margarita, alias Teodora Cedeño, así como al depravado Rojas Gómez, su flamante e incompetente como truculento Ministro de insalubridad e insanidad públicas, y, claro está, al prostituido y degenerado miserable, mercenario  y canalla aborrecible Zenén Caba Placencia, cabecilla del grupo de sobornados que compone la directiva del Colegio Médico Dominicano, CMD, para que hagan la caravana de yipetas del año y helicópteros, que acostumbra fletar el viciosamente incorregible, empedernido corrupto, corrupto sanguinario e indolente, Leonel Antonio Reina, y se lleguen a la vivienda de esta familia, cuya destartalada vivienda-choza está exactamente a la orilla del río Tenguerengue, que desemboca en el río San Juan, que a su vez descarga en el Yaque del Sur; lo que arroja un cuadro panorámico inequívoco de la dinámica incontrolable de la epidemia del cólera, que desde ya está arrasando con la población dominicana. en tanto, inútilmente, el incompetente ocupante del Poder Ejecutivo y su incumbente de insalubridad e insanidad públicas, queman aceite, como dice el refrán, inútilmente, en torno a su criminal farsa de lesa humanidad, de que tienen a la epidemia bajo control, lo cual fue respaldado y congratulado y frenéticamente aplaudido en el acto publico de campaña política en que el disoluto, viciosamente incorregible en todo cuanto significa corrupción y depravación, que es Leonel Antonio Reina, mostrando su orfandad absoluta de escrúpulos, vociferaba, ridícula e imbécilmente, como un  estólido cretino, que su gobierno acaba de poner bajo control la epidemia del cólera.

La familia, escenario del trágico desmentido directo y vivo, a la sucia y rastrera demagogia de Leonel Antonio Reina y su equipo de desalmados, es del paraje El Hato de la sección La Culata de la Maguana. Primero murió la niña de apenas diez meses, que llegó muerta, con el cuadro de deshidratación extrema, del 30 al 31 de diciembre del 2010, a la emergencia del hospital Alejandro Cabral de la Maguana, y el 1ro. de enero del presente 2011, fue internado su hermanito de dos años, muriendo el 3 de enero, una semana casi exactamente después que el perdulario aborrecible montara su patético sainete macabro, de que su incompetente y podrido gobierno tiene bajo control el cólera; que fuera propalado irresponsable y criminalmente por la prensa mercenaria, particularmente por los órganos letrinas de lenocinio del Opus Dei Iglesia Católica-Vaticano, de Pepín Corripio y demás, como Listín Diario, Hoy, El Nacional y el pornográfico y mafioso diario libertino, que se hace llamar libre, que por cierto, es como tradicionalmente se denomina  a las prostitutas, mujeres libres.

Pero esto no es todo ni es lo peor de por medio, una vez que comprobadamente cuando el perdulario disoluto Leonel Antonio Reina, en su manía demagógica de inescrupuloso obsesivo, declaraban, en un típico caso de estolidez, que es la peor  ignorancia de lo que obligatoriamente se debe saber, que su genial gobierno, apenas empezó la epidemia del cólera, que la ciencia médica estipula cinco años para controlarla, no eliminarla, ya la tiene bajo control; como aquello de su economía blindada; hacía apenas días que la comunidad médica de la Maguana estaba consternada por cuanto la ciudadana dominicana Genara Valenzuela Mateo, de 43 años de edad, residente en El Ciruelo, Hato del Padre, sección de La Maguana, acababa de morir fulminada por el cólera, el día 18 de diciembre del 2010. Para entonces, aún todavía se hacía lo que se llama la prueba rápida del cólera, la cual dio positivo; y ese resultado, al ser enviado al Laboratorio Nacional de Santo Domingo, fue secuestrado y desaparecido hasta la fecha de haber transcurrido ya la primera semana del mes de enero del 2011. Más aún, resulta que el médico que trató a la difunta Genara Valenzuela, que es el presidente del Comité Provincial del Colegio Médico Dominicano, como es su deber y responsabilidad, se dirigió a donde el pervertido miserable mercenario Zenén Caba Placencia, quien optó por expresarle, que era mejor que se callara la boca y dejara eso así; lo que corrobora y confirma que está vendido como lo que es, un vil y miserable canalla mercenario.

Después de nuestra campaña de denuncias y desenmascaramiento, poniendo en primer plano el interés en la salud y la vida de la población, el soez y vulgar sainete criminal del disoluto indolente Leonel Antonio reina y su equipo de insalubridad e insanidad públicas, respaldado por lo de, por la plata baila el mono, por Zenén Caba Placencia y la actual directiva del Colegio Medico Dominicana, al empezar la segunda semana del presente mes de enero, solo en Azua, diez casos de cólera se vienen a sumar a los más de 150 casos, que han estado ocultando la prensa sobornada y el gobierno como el Colegio Medico Dominicano, sobre los otros casi 200, que a regañadientes, no han podido negar.

Es que no nos vamos a callar, es que vamos a seguir denunciando la criminal indolencia y desatención gubernamentales a la población, ante la epidemia del cólera y las otras epidemias como el dengue hemorrágico mortífero, la malaria, la lestospirosis y demás.