TEMISTOCLES MONTAS SE SUMA A LA CAMPAÑA DE MENTIRAS DE QUE EL GOBIERNUCHO CORRUPTO DEL DAÑINO HA REDUCIDO LA POBREZA EN UN 6 % Y HA MEJORADO LOS SERVICIOS DE SALUD

Lo que sí está haciendo el Gangster Murmullo es favorecer la invasión haitiana así como financiar con los recursos del pueblo los negocios de salud de la parásita y oscurantista como ultrareaccionaria Iglesia Católica

02-07-2014

 

El hombre de paja, y empedernido fantoche simulador, detrás de lo que quiere ocultar al desalmado delincuente de siete suelas, y una más, que en realidad es, ha culminado siendo un mentiroso patológico y compulsivo; lo que, sumado a su condición de pusilánime, chupamedia e hipócrita, de la especie de la gatica de María Ramos, que tira la piedra y esconde la mano, que, además de su farsa ridícula y de mal gusto, de querer presentarse como contrario al crimen organizado, cuando todo el mundo sabe que, sólo al momento de investirse como Presidente pálido pelegato boschista, ya tenía amasada una fortuna de 600 millones de dólares, que sobrepasaba los 26 mil millones de pesos, sin que ni un solo peso de este montón lo hubiese obtenido fuera o al margen de su íntima vinculación con el hampa y el bajo mundo, en estrecha relación con la corrupción del Estado.

Pero, la pudrición personal es un proceso de muerte progresiva, en el que el sujeto protagonista, y portador del cuadro de la pudrición, pierde todo sentido de lo moral y anula cualquier vínculo con principios éticos; por lo que, de hecho, se convierte en un animal que no le importa nada; y queda huérfano para percibir el precipicio que separa la verdad de la mentira.

Así, el Dañino Medina, con su figura de papujo que sufre de estreñimiento crónico, ha querido pasar de contrabando de que, durante su inepta y estúpida gestión, ha logrado reducir la pobreza en un 6%; y que, además, ha logrado alcanzar una mejoría ponderable en el campo de la salud, lo que no podía estar más lejos de la verdad.

A esta perversa campaña se ha sumado el ahora flamante aspirante a ocupar el puesto de Dañino Medina, su Ministro de Planificación y ex-Ministro del desastre del sector eléctrico y su entrega, a precio de vaca muerta, al capital financiero imperialista, Temístocles Montás; quien habría querido hacerse el gracioso, no se sabe ante quién, diciendo e insinuando cosas, con frases imprecisas y capciosas, como las de: “El camino seguido por los gobiernos pálidos ha sido incorrecto. Todo lo que hemos hecho ha estado errado”, y cosas por el estilo; con que se mostraba airado y molesto con el mesianismo gangteril de Leonel Antonio Reyna; quien lo había medido, tasado, pesado y capado, descartándolo de plano como contendiente por la candidatura presidencial, por su falta de significado y contenido en sus funciones.

Y, desde aquella posición, Temístocles Montás hace una gran pirueta, dando un salto hacia atrás, que lo coloca exactamente a la par con el desacreditado Dañino Medina, quien viene teniendo una caída vertiginosa en su figura, por traidor; del calibre o peor que Pedro Santana, con el agravamiento de que es un traidor cobarde y pusilánime a la patria y a todo el pueblo dominicano; por su asqueante y repugnante arrodillamiento vil ante los haitianos, llegando hasta al extremo de estar usando, como ladrón que es, los fondos y recursos de los tributos fiscales del pueblo y de sus riquezas, hipotecadas o entregadas al capital extranjero desnacionalizante, para financiar la entrega de la nacionalidad dominicana a los más acérrimos enemigos de la nación y pueblo dominicanos, que son los haitianos; que han venido practicando una eventual invasión masiva sobre la República Dominicana, buscando alterar la naturaleza de la idiosincrasia y el espíritu nacional dominicanos, para transformarnos en hordas refractarias a la civilización y retrotraernos a un tan viejo como superado vínculo con la idiosincrasia del salvajismo africano; del que hemos aprendido, por conciencia, por instinto de salvación y de progreso, que debemos distanciarnos; y superar, apelando a las raíces y contenidos de más de cinco siglos, que tiene el proceso de formación de la nación dominicana y la dominicanidad. Como, exactamente, Dañino Medina se retrata a sí mismo, en su recalcitrante condición, de estafador inescrupuloso y desalmado, con su triste relato del cuento del camello.

En el caso de los haitianos, y su inaceptable presencia injerencista y violatoria de nuestra soberanía nacional, lo que están haciendo Dañino Medina, y su equipo de estúpidos corruptos y rastreros, es vendernos y hacernos cargar el monto en pesos de lo que están recibiendo en pago a su traición imperdonable.

Pero, Temístocles Montás, cómo se atreve, como supuesto economista y real improvisado en este campo, igual que en el de la política y los problemas de Estado, a afirmar que durante la gestión del Dañino Medina, de la que es el flamante Ministro de Desplanificación, ha mejorado apreciablemente, o hasta en una medida insignificante, la atención médica y los servicios de salud del pueblo dominicano;  la vez que respalda el camello de que la pobreza ha disminuido en un 6% desde que el Dañino Medina, (que, de paso, ambos han llevado la deuda externa más allá de toda lógica razonable), ascendiera a ser el cabecilla del desastre que es su gestión pálido pelegato boschista.

Los hospitales públicos, sabido es que carecen hasta de aspirina y de todo tipo de material imprescindible de apoyo para atención a la gente. Y que, demás, a todos se les atrasan regularmente, hasta con 8 meses, en la entrega del insignificante subsidio que se les asigna, lo que contrasta con la entrega a tiempo, de los fondos a los centros médicos privados que el Estado Dominicano le ha regalado y le financia, como negocios de la Iglesia Católica-Vaticano, y en particular del parásito y vividor, chupa-sangre del pueblo dominicano, el alias Cardenal, Nicolás de Jesús -Hildebrando Borgia- López Rodríguez.

Debiéndose subrayar, que el monto de los subsidios a los hospitales públicos de todo el país, no suma ni unas cuarta parte de los millones de pesos que, con una puntualidad inglesa, las gentuzas de las áreas financieras, cumpliendo órdenes personales del baboso hombre de paja, cebo tibio, mentiroso, estafador y traidor, peor que Pedro Santana, para que, con la más estricta puntualidad, se les entregue el financiamiento masivo del Estado a los negocios privados de la salud de la Iglesia Católica-Vaticano y del alias Cardenal: Plaza de la Salud, Cedimat y los otros.

La condición de pálido pelegato boschista, es tan terriblemente contaminante en el envilecimiento, y hacer traidores hasta a sí mismos y a su misma sombra, a los que se adhieren y contaminan con esa peste, que tanto el hombre babosa y de paja, como el estafador del camello Dañino Medina y Temístocles Montás, se jactan de su formación de evangélicos y protestantes. Cristianos al fin y al cabo, nada digno cabe esperar de ellos. Se trata del opio más envilecedor de todas las formas de este alucinógeno.

 

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